Los avances en ortodoncia han permitido introducir nuevas alternativas más eficientes y cómodas para los pacientes. Entre ellas, los brackets autoligables destacan por combinar eficacia, menor molestia y tecnología avanzada.
Reducción de fricción y movimientos más rápidos
Los brackets autoligables cuentan con un mecanismo de cierre individual (clip o puerta), eliminando la necesidad de ligaduras elásticas o metálicas. Esto disminuye la fricción entre el bracket y el arco, facilitando los movimientos dentales y acelerando en muchos casos el tratamiento comparado con los sistemas convencionales.
Mayor comodidad para el paciente
Al prescindir de ligaduras que pueden aflojarse o romperse, se reduce también el riesgo de irritación en labios y encías. Esto, junto con el diseño de baja fricción, mejora sensiblemente el confort durante el tratamiento.
Menos citas de ajuste
Los sistemas autoligables requieren menos ajustes frecuentes, ya que los clips permiten una mejor gestión del arco y menos necesidad de tensiones periódicas. Esto se traduce en una reducción del número de visitas al ortodoncista.
Mejora en la higiene bucal
La ausencia de ligaduras hace que la placa bacteriana tenga menos superficies donde acumularse, facilitando la limpieza diaria y disminuyendo el riesgo de caries o enfermedades periodontales durante el tratamiento.
Estética más discreta (en modelos cerámicos o linguales)
Existen brackets autoligables de cerámica o incluso en versiones linguales (colocados detrás de los dientes), lo que ofrece una alternativa más estética para quienes buscan algo menos visible que los brackets metálicos tradicionales.
Acude a clínicas especializadas
Si estás considerando iniciar un tratamiento con esta tecnología, lo ideal es confiar en profesionales con formación y experiencia. En brackets autoligables Madrid encontrarás un equipo especializado que aplica las técnicas más modernas para garantizar un proceso eficaz, cómodo y predecible.